Soy Carla me considero una persona que tengo una misión clara en esta vida. He nacido para ayudar a otras personas. Me han pasado muchas cosas, no he tenido una vida fácil. De todos esos tropiezos renació Carla la fuerte, una mujer empoderada. 

Mis padres no me supieron dar el amor que necesitaba. Me sentí abandonada, con un apego inseguro, aprendí que tenía que ser perfecta para que me quisieran.

A día de hoy he sanado la herida de abandono que me ha acompañado toda mi vida y ha justificado todos mis comportamientos. 

En la adolescencia, sufrí anorexia para llamar la atención de mi madre. 

Decidí estudiar psicología para entender bien todo lo que me pasaba. 

En la edad adulta he sufrido dependencia emocional del hombre de mi vida. Escogí una pareja con todas las “cualidades” que me habían faltado de mis padres. Al inicio, me daba mucho amor y seguridad. Con los años mostró su personalidad narcisista y manipuladora, que me hizo quedar totalmente enganchada en una relación de no amor. 

Y todo cambió y trascendió, varios sucesos me hicieron abrir los ojos, despertar, y poder  florecer la Carla que soy y he venido a ser. Empecé un proceso de crecimiento personal, con el curso avanzado de coaching, que me ha llevado a conocerme, a amarme, y ser una mujer independiente y fuerte que sabe muy bien lo que quiere y no quiere en esta vida. 

Así que, después de mirar atrás y comprender toda mi vida, agradezco por todo lo que he pasado. Ahora miro hacia adelante con gran ilusión y entusiasmo por la segunda vida que me espera por vivir, tal y como deseo y decido vivir con paz y amor.

Los valores que a día de hoy rigen mi vida son el amor, la sabiduría y el coraje.

Mi misión es acompañar a mujeres que están sufriendo dependencia emocional de su pareja para que puedan salir de esa relación. Les ayudo desde mi propia experiencia, desde lo que yo he vivido y por lo que yo he pasado y me ha servido a través de mi programa ADA, consiguiendo la vida que realmente quieren vivir, una vida libre, llena de amor y paz.

Lidera tu propia vida sintiéndote, auténtica, fuerte, empoderada y feliz desde el amor y tu paz interior.

Scroll to Top